Beneficios de instalar placas solares en una comunidad de vecinos

Conoce los beneficios de instalar placas solares en una comunidad de vecinos, las perspectivas de rentabilidad que ofrece y la normativa legal para hacerlo.

En este post abordamos la instalación de paneles solares en comunidades de vecinos, que permite a los residentes en edificios obtener el ahorro y autosuficiencia energética que aseguran los sistemas fotovoltaicos de autoconsumo.

Veremos en primer lugar cómo los requisitos legales no son difíciles de cumplir, ni conducen a un proceso largo y lento, pese a las ideas preconcebidas que pueda haber al respecto. Además, incidiremos en cuánto de rentable es instalar placas solares en una comunidad de vecinos, y también te informaremos de todos los beneficios de decidirse por esta solución, incluyendo varios que no son tan evidentes, y que suelen pasar inadvertidos pese a su relevancia.

 

Normativa de instalación de placas solares en comunidades de vecinos

Existe la creencia de que para poner placas solares en edificios hace falta que todos los vecinos estén de acuerdo sin excepción.

Sin embargo, en realidad solo es necesario que una pequeña parte de ellos estén conformes según la Ley de Propiedad Horizontal, que es la normativa que rige para la instalación de placas solares en una comunidad de vecinos, y cuya última actualización se realizó en 2019.

Concretamente, bastaría con que quieran 1/3 de los propietarios de los inmuebles, que son los que tendrían capacidad decisoria, dado que los inquilinos que puedan residir en el edificio no tendrían voto para dar el visto bueno, aunque sí podrían beneficiarse del acceso al autoconsumo en caso de que el dueño del inmueble sea partícipe.

Precisamente los propietarios que están de acuerdo serían quienes tendrían que asumir el coste de la instalación de las placas solares en la comunidad de vecinos, y solo ellos resultarían los beneficiarios (al margen de que sus eventuales arrendatarios puedan serlo de manera indirecta), por lo que quedarían excluidos aquellos dueños de inmuebles que no hayan querido participar.

Con todo, sin en futuro cambiasen de opinión, la Ley de Propiedad Horizontal contempla la posibilidad de que se unan, siempre y cuando se amplíe la instalación original. No podrían formar parte de la misma, habría que realizar otro proyecto teniendo en cuenta esta vez a los nuevos propietarios.

Además, la legislación también es lo suficientemente flexible como para admitir múltiples vías de reparto de la energía producida, incluyendo entre las opciones tanto que sea por la participación en los costes instalación como que se haga en función de la potencia contratada por cada vecino. Algo importante porque no van a tener las mismas necesidades energéticas, por ejemplo, inmuebles habitados por familias con niños que aquellos con personas que vivan solas.

En cualquier caso, sí que resultaría obligatorio para poder instalar placas solares en la comunidad de vecinos la creación de un documento con el porcentaje de reparto energético acordado, en el que se refleje la energía neta individualizada para cada vivienda.

Es cierto también que los requisitos se complican un poco más si se pretende utilizar los módulos fotovoltaicos para la iluminación o la alimentación eléctrica en general de las zonas comunes del edificio, ya que en tal caso el porcentaje requerido para la autorización sube a 3/5. La inversión sería asumida por todos tanto por los propietarios favorables como los no favorables, y la totalidad de vecinos se beneficiarían del ahorro en gastos comunitarios que supondría la dotación con los sistemas de autoconsumo.

Por lo demás, habría una serie de requisitos técnicos que no resultan difíciles de cumplir en este tipo de instalaciones de paneles solares en comunidades de vecinos, ya que basta con que la terraza reúna las condiciones precisas de espacio disponible para ser habilitable como campo solar, o que las viviendas donde se encuentran los puntos de suministro estén en un rango de 2000 metros con respecto a la instalación fotovoltaica.

Adicionalmente, la conexión tendría que realizarse al mismo centro de transformación, y la totalidad de propietarios que participen en el proyecto deben firmar un acuerdo con una única distribuidora.

¿Es rentable poner placas solares en una comunidad?

Lo cierto es que resulta bastante rentable poner placas solares en una comunidad. De acuerdo a diferentes estudios sería factible una reducción anual en la factura eléctrica de hasta el 50%, consonante con una disminución del consumo de red de entre el 40 y el 60%. Aunque los porcentajes concretos variarían en función de:

  • Potencialidades que tenga la terraza del edificio como campo solar.
  • Características técnicas de la instalación fotovoltaica.
  • Cantidad de viviendas que haya que alimentar y requerimientos energéticos que tengan las mismas.

Salvo casos muy puntuales, es muy difícil que puedan generarse excedentes al instalar placas solares en una comunidad de vecinos, debido a que la generación de potencia queda limitada por el espacio de la terraza, que si bien puede ser mayor que el de una casa individual tendrá que nutrir a un gran número de hogares.

Con todo, la opción de hacer instalaciones con compensación de excedentes estará siempre sobre la mesa para los casos en los que sea viable, aunque habría que tener en cuenta que la distribuidora con la que se firme el acuerdo lo prevea. En este sentido, puede ser más probable que ofrezca alguna solución de batería virtual que permita compensar, por ejemplo, la producción sobrante de los meses de días largos y soleados con la deficitaria de las estaciones invernales.

El ahorro con placas solares que se obtiene mes a mes favorece que el periodo necesario para la rentabilización de la inversión sea muy corto, con plazos de amortización de tan solo 3 años, tal y como lo refleja esta publicación de la OCU, en la que se realiza un cálculo para un edificio prototipo ubicado en Madrid con una comunidad de 20 propietarios.

Además, pese a que las ayudas Next Generation no estén ahora mismo en vigor, sí que puede haber otras subvenciones y bonificaciones fiscales en las distintas comunidades por actuaciones que incrementen la eficiencia energética de los edificios.

Otras ventajas de las placas solares en las comunidades de vecinos

Las ventajas de instalar placas solares en las comunidades van incluso más allá del ahorro inmediato evidente, o la rápida rentabilización de la inversión.

Así, posibilitan repartir los costes de instalación entre los múltiples participantes, de acuerdo además a las necesidades de consumo específicas de cada vivienda. Y también, hacen factible la dotación con sistemas generales de climatización más eficientes como los de aerotermia, que suponen un ahorro adicional.

Incluso, abren nuevas posibilidades, al permitir la creación de puntos de recarga para vehículos eléctricos en los garajes del edificio, siempre y cuando hablemos eso sí de instalaciones excedentarias, con producción eléctrica sobrante tras cubrir las necesidades de las viviendas ( este caso sólo sería posible si hablamos de instalaciones a nivel comunitario).

Como has podido comprobar, los beneficios de las placas solares en las comunidades son sustanciosos y variados. Si es una solución que te interesa, en esto otro post que escribimos podrás informarte sobre todo lo que necesitas saber para poner placas solares en el tejado de tu comunidad.

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